La Ruta de las Animas: ¡Ha nacido una estrella!

Road Book facilitado por la organización

Textos y fotos: Pedro Flores. 
Publicado en la revista Solo Moto

El panorama de las concentraciones y encuentros moteros se ha disparado en los últimos años reflejado en la enorme cantidad de ellos que hay todos los fines de semana en este país.
No esta claro si eso es sinónimo de calidad, tal vez si, pero de lo que si que estoy seguro es que no es sinónimo de originalidad. Muy pocos eventos se salen se lo habitual y ya se ha aceptado un tipo de concentración-organización básica que es la que sirve “para todo”, lo que hace que ir a una concentración u otra apenas aporte nada diferente.

Se que para mucha gente es suficiente, y lo respeto, pero también se que hay motards con un “algo” dentro de ellos, que les hace buscar cosas diferentes. Es difícil, muy difícil, ofrecer algo diferente en un mundo que parece todo inventado, ¡pero justamente ahí esta el mérito! y para meritorio lo que vivimos algunos miembros del Moto Club Zona Estival el fin de semana 10 y 11 de Septiembre en Jaca y sus alrededores, por que si de algo puede presumir lo que ahora relataré es de original y...¡completamente diferente!


Ese fin de semana, los chicos y chicas del Motoclub Picachos Pirenaicos de Jaca, nos deleitaron con la organización de la I Ruta de las Ánimas. Y algo que se llama así, ya destilaba que podía ser algo muy especial.
¿Y en que consistía esta nueva y “revolucionaria” idea? Pues algo tan novedoso como una ruta ¡nocturna!, con ¡road book! lo cual añade otra novedad ¡el desconocimiento del recorrido hasta que recibes el libro de ruta!.

Peter, Nacho y César en la I Ruta de las Animas.

Para hacerlo aun mas atractivo cada moto va con su dorsal y la salida se hace desde una plaza de Jaca vallada a modo de parque cerrado, con todas las motos participantes dentro del mismo. ¡¡Creando un fantástico panorama y ambiente!!.

Tras las inscripciones, entrega de dorsales, libro de ruta, camiseta del evento y adhesivo conmemorativo del mismo, en un pequeño briefing nos destacan ¡que nos divirtamos lo máximo posible! y que disfrutemos de los 250 km de curvas y Pirineos…eso si,
¡Pirineos nocturnos!


¡Y comienza la acción! El primer grupo de motos sale a las 19:30.
La noche esta empezando a llegar a Jaca y sus montañas pero los primeros km son con bastante luz, y con aquella sensación estupenda de que estas empezando a vivir algo nuevo de verdad.
Enseguida el libro de ruta nos indica exactamente el primer cruce a los 10 km, gracias a que hemos puesto el parcial a cero al salir del parque cerrado. La bifurcación nos mete en una carretera muy estrecha, con un asfalto mas que dudoso y algo de gravilla, eso si, todo perfectamente avisado por el road book.
Van pasando los km por unos parajes espectaculares que tratamos de disfrutar pues sabemos que dentro de poco apenas veremos lo que alumbre el faro de la moto.

Se van sucediendo cruces, algunos están claros y otros debemos confirmar que es la dirección correcta, lo cual nos lleva a comentarlo entre nosotros creando así una perfecta sensación de equipo, cada uno dando su idea o incluso haciendo bromas ante la posibilidad de perdernos y quedarnos sin la cena que la organización tiene preparada a mitad de recorrido.
Esto es, justamente, lo que hace de esta historia algo especial, el poder decidir, buscar y orientarte a la vez que conduces por carreteras desconocidas con cada vez menos luz, por supuesto esto hace que se sucedan algunas anécdotas y momentos divertidos.
Finalmente y casi de noche total, sobre las 21 horas, llegamos al restaurante, una preciosa borda aragonesa donde nos atienden muy amablemente. Aparcar las motos sobre la hierba, bajo las primeras estrellas, con todo el mundo comentando lo vivido en esta primera parte de la ruta, es uno de esos  momentos mágicos que aun te convence mas y mas que algo muy especial estas viviendo.

Por delante 188 km, que ahora ya serán totalmente a oscuras y con carreteras de alta montaña algunas aun más estrechas y reviradas, así que no alargamos la sobremesa y tras abrigarnos algo mas nos introducimos de lleno en la noche pirenaica.


Hay luna llena y eso nos permite adivinar las espectaculares montañas que nos rodean.
Los km se suceden sin pausa y sin apenas dificultades, hasta que por culpa de adelantar a un grupo que habíamos alcanzado, no nos damos cuenta de un cruce a la izquierda y continuamos en dirección equivocada…. Tendríais que ver las caras que pusieron unos excursionistas, acampados al final de esta carretera sin salida, cuando les preguntamos que donde estábamos…Comprendemos nuestro error, y tras unas risas y volvemos hasta el cruce, encarando la ruta correcta y acelerando con un poco más de ganas para compensar el tiempo perdido. ¡Es la gracia y el desafío de esta pequeña aventura!

Entramos en el Pirineo Navarro y bellísimos pueblos son atravesados por los grupos de motos ante la divertida y curiosa mirada de los visitantes y lugareños que andan despiertos disfrutando de una maravillosa noche de verano…Izalzu, Ochagavía, Oronz, Esparza, Sarries, Güesa son algunos de ellos…todos dignos de una ruta como esta.

La ruta continua y la siguiente sorpresa es una parada en la Foz de Arbayún donde la organización a modo de control y reagrupamiento nos invitan a un café bajo las estrellas…¡Bien por estos chicos del Motoclub Picachos que están en todo!
Son las 0:45 de la noche mas o menos y quedan unos 100 km hasta Jaca, y ya se siente algo de cansancio al volver arrancar, pero lo tomas como un desafío más.
Los km pasan más rápidamente y el terreno se hace mucho más abierto camino de Lumbier, Sangüesa, Javier y Yesa. De ahí a Jaca es todo directo por una rápida carretera que nos devuelve al punto de partida, donde todo había empezado a las 19:30.
Son las 2:00 de la mañana, felicidad y cansancio nos llenan por igual. Una de las sensaciones más comentadas a la llegada era que te acostumbras a todo, y en este caso más por que sin apenas darte cuenta vas acelerando entre curvas cada vez con más y más confianza a pesar de la oscuridad.
Al día siguiente, la organización, nos tiene preparada una excursión, pero a pesar de ello algunos se van a “celebrar”, al pub colaborador “La antigua Estación”, el éxito conseguido.

A las 11 de la mañana del domingo salimos de Jaca hacia San Juan de la Peña. Por unas carreteras mas que interesantes y un paisaje muy agradable de ver después de la experiencia nocturna. Visita muy interesante y completa al monasterio con una imagen espectacular de todas las motos aparcadas en la explanada del mismo. Algo más tarde nos ofrecerían un aperitivo en un hotel motero de la zona que colabora con la organización.
¡Perfecto final de fiesta para este fantástico fin de semana motorutero!


Y llega el momento de las despedidas, cantidad de felicitaciones es lo que reciben los componentes de los Picachos Pirenaicos, y no es para menos, ya que para ser la primera edición de algo tan complejo y diferente, el éxito organizativo es total.
Como en todo, la experiencia de esta primera edición les dará un montón de ideas para mejorar y seguro lo notaremos en las siguientes.

Sin lugar a dudas, en el cielo nocturno de Jaca, el fin de semana 10 y 11 de septiembre de 2011, una nueva estrella nació y brilló con una fuerza inusitada…¡el brillo de las grandes ideas! por que una brillantísima idea es ¡¡La Ruta de las Animas!!

Desde el manillar de la ZRX, Pedro Flores.